Personería Jurídica - Resolución I. G. J. Nº 0001744 del 8 de noviembre de 2011

17 de marzo de 2014

Homenaje a Juan Manuel de Rosas en el Museo Cornelio de Saavedra

El marco imponente del Museo Cornelio de Saavedra, en Buenos Aires, fue el sitio escogido para el acto que Patricios de Vuelta de Obligado, juntamente con Jóvenes Revisionistas, organizaron en homenaje a los 137 años del fallecimiento del brigadier general Juan Manuel de Rosas, el Sábado 15 de marzo de 2014.

Muchas fueron las personalidades que se acercaron, entre ellas el Dr. Alberto Gelly Cantilo (presidente del Instituto Nacional de Investigaciones Históricas “Juan Manuel de Rosas”), el Dr. Arturo Pellet Lastra (vicepresidente de la antedicha institución), el Prof. Jorge Oscar Sulé, el Dr. Jorge Cellier (ex asesor del Honorable Congreso de la Nación), el Prof. Mario Freire (miembro del Instituto Rosas de Gral. San Martín), el Sr. Mario Nicolás Di Blasio (miembro del precitado instituto) y el Prof. Oscar Planell Zanone (miembro decano de los Patricios de Vuelta de Obligado).  Asimismo fueron numerosas las adhesiones recibidas, contándose entre ellas el Regimiento de Infantería 1 “Patricios”, la Secretaría de Cultura, Educación y Turismo de Navarro, la Subsecretaría de Cultura de Ramallo, la Dirección de Cultura de San Pedro, el Instituto Nacional de Investigaciones Históricas “Juan Manuel de Rosas”, el Instituto Nacional Browniano, el Museo Histórico Municipal "Hércules Rabagliati" de Ramallo, la Escuela Político-Sindical de la UATRE, la Plataforma “20 de Noviembre”, la Agrupación “Jacinto Lacebrón Guzmán”, la Juventud del PPR, el Movimiento Bastión, República Soberana y el Portal “Revisionistas”. 
El evento contaba con un programa variado y colorido, muy propio para quienes deseaban pasar en familia un rato agradable y lleno de conocimientos que, ofrecidos desde distintas ópticas, reflejaban cómo era nuestro país hace un siglo y medio atrás. Pues, para darnos cuenta de la magnitud del despliegue visto en el homenaje, no hubo discursos trillados o solemnidades distantes, sino, más bien, una gran empatía entre los protagonistas y el público presente que hizo muy ameno el recordatorio.  En el transcurso de dos horas y media, el público podía ver uniformes civiles y militares de la época de Rosas, cantos y bailes que sonaban en la campaña y los salones porteños de la Federación, objetos antiguos –mostrados en la visita guiada al museo-, y un atardecer a puro mate y torta frita que, dentro de la grilla, fue denominado y auspiciado como “Mateada Federal”.
En nombre del Instituto Nacional de Investigaciones Históricas “Juan Manuel de Rosas”, hizo uso de la palabra su vicepresidente, el Dr. Arturo Pellet Lastra, quien puso énfasis en “la lucha por la identidad nacional, acaso, el legado más importante que Rosas nos dejó para la posteridad”. Mencionó entre sus asertos, “todas las defensas que hizo de la patria” y resaltó la felicidad que el Restaurador “tendría hoy al ver el homenaje que se le está tributando”.
 
Seguidamente, tocó el turno a Gabriel O. Turone, presidente de Jóvenes Revisionistas y Pro-secretario de Patricios de Vuelta de Obligado, el cual hizo diversas comparaciones entre aquel pasado heroico y este presente lleno de incertidumbres, como cuando expresó que “No rendimos tributo a 137 años de la muerte de un hombre común, sino, más bien, a la de uno de esos que legaron para la posteridad una escuela de civismo que todavía nos sirve y educa con contenidos espirituales ante tanta barbarie, ante tanta relativización del bien y del mal”. Al evocar el lugar en donde se estaba desarrollando el homenaje, Turone hizo un punteo de los honores que Juan Manuel de Rosas le tributó a Cornelio Saavedra entre 1829 y 1831. Es que, como sostuvo el orador, “el brigadier general Rosas se yergue ante la historia como el primer reivindicador de quien, como él, sufrió el exilio, fue deshonrado en su memoria y se constituyó en baluarte de las tradiciones religiosas, militares y cívicas de la patria que nacía”.
 Pasados los discursos, siguió un emocionante toque de silencio que hizo un trompa del Regimiento de Infantería 1 ‘Patricios’, memorable sinfonía de viento que rinde culto a la memoria de los ilustres argentinos que, como Juan Manuel de Rosas, merecen el descanso eterno y la gratitud de todo un pueblo que nunca lo olvida. Y aquí finalizó una parte del acto, pues luego se anunció el comienzo de la visita guiada a la Sala “Confederación Argentina” del Museo Histórico “Cornelio Saavedra”.  Esta fue brindada por el Sr. Jorge de la Calle, quien a lo largo de una hora ofreció una pormenorizada explicación de los sucesos más preponderantes de la época de Rosas, y de los objetos que allí se encuentran, que son numerosos y de incalculable valor simbólico. En dicha sección del museo hay banderolas, litografías, la bandera de la Federación que ondeó en el Fuerte de Buenos Aires hasta 1852, un mapa de las islas Malvinas de 1841, el escritorio que usaba Rosas para redactar su nutrida correspondencia, jarrones con distintas efigies del Restaurador y una extensa variedad de otras reliquias que profundizan los rasgos y el conocimiento de ese pasado tan criollo y soberano que convoca a curiosos, simpatizantes e investigadores. Como no podía ser de otra manera, el guía De la Calle recibió unánimes aplausos acompañados de las más sinceras felicitaciones por su exposición. 
Y aquí, se daba por concluida otra etapa del homenaje a Juan Manuel de Rosas para comenzar la última de todas: la musical, que estuvo amenizada con porciones de torta frita que eran ofrecidas al público a medida que éste salía del museo y se adentraba en el parque del mismo. Con previo aviso, los asistentes al acto fueron advertidos para que lleven sus propios mates y termos, redondeando aquel concepto de la “Mateada Federal” esbozado al inicio de esta crónica.  
Entretenido el público con esta merienda de neto corte criollo, al mismo tiempo, tres parejas de baile surero desplegaban sus atavíos y figuras al ritmo de una Huella, un Triunfo o un Minué Montonero. Interesante labor la de estos artistas de la música nativa, quienes, representados por la pareja de baile “Estirpe Surera” (Liliana Lorán y Fabián Fuhr) y por la Agrupación Folklórica Nativa “El Pehual” (Mirta Elizabeth Báez, Juan Carlos, Manuela Díaz y Miguel Gonzaléz), no hacen más que enseñarnos las armonías y los divertimentos sanos y silvestres del ser nacional allá lejos y hace tiempo. De más está decir, que dichos bailes hacían furor tanto en la campaña como en los salones urbanos durante la época de Rosas. También hemos oído, por allí, la Condición y el Cuando, e incluso una variedad de Mazorca del año 1850, pieza con la que abrieron su número estos estudiosos en la tarde evocativa.

Incluso, hubo una alternancia entre el baile y el canto, pues también recordaron al Restaurador Rosas los guitarristas sureros Gustavo Catrihual (de ascendencia aborigen y compositor, por lo mismo, de temas que hablan de malones, cautivas y puestos de frontera) y Jorge Berón, un tradicionalista del barrio de Mataderos.  Ambos generaron deleite entre los presentes, quienes, a esta altura, ya estaban satisfechos por tantas y tan buenas actividades.
 
El crepúsculo se iba adueñando de todos los rincones del museo, y el gallo compadrón que deambulaba con graciosa simpatía, en un momento dejó de verse.  Se iba el homenaje y se acallaban las guitarras cantoras. Hasta allí había durado esta ofrenda en tributo al Ilustre César de las Pampas y campeón de la soberanía nacional.

Queremos agradecer a las autoridades del Regimiento de Infantería 1 “Patricios”, a los directivos y empleados del Museo Cornelio de Saavedra, y a todas las instituciones, amigos y camaradas que con su inestimable colaboración hicieron posible este homenaje.